¿Alguna vez has pensado en lo que sucede con tu viejo reproductor de MP3 o con el control remoto una vez que los tiras? Todo lo que tiene un enchufe o una batería y se descarta en la basura contribuye al aumento de los residuos electrónicos, conocidos como e-waste. Los residuos electrónicos representan un problema global, cuya responsabilidad, según lo indicado en el Objetivo de Desarrollo Sostenible 12 de la Agenda 2030 – Consumo y Producción Responsable, recae en los fabricantes, quienes deberían adoptar un ecodiseño que facilite el reciclaje, la recuperación y la durabilidad de los dispositivos. Los consumidores, por su parte, están llamados a un uso consciente de los productos y a un comportamiento adecuado en su desecho, que puede implicar reparación, regalo o regeneración antes de ser eliminados según principios de economía circular.
Desde este último punto de vista, un avance puede lograrse gracias al papel, uno de los materiales más antiguos producidos por el hombre. Este es el objetivo del proyecto europeo CircEl-Paper, que busca desarrollar circuitos impresos funcionales (PCB – Printed Circuit Boards) hechos de papel, los cuales pueden ser desechados y reciclados en el proceso tradicional de reciclaje de papel, respondiendo así a las necesidades de economía circular en la electrónica. CircEl-Paper involucra a un consorcio de empresas internacionales, incluida Fedrigoni, con su Centro de Investigación y Desarrollo en Grenoble, especializado en soluciones de RFID y electrónica impresa.
Entre las primeras aplicaciones para validar la tecnología de los PCB en papel figuran tres casos de uso en medicina, logística y electrónica de consumo: un sensor médico para medir los niveles de glucosa en la piel, un embalaje con un indicador integrado de tiempo y temperatura (TTI) o tarjetas de felicitación que reproducen música.
La tecnología CircEl-Paper
La tecnología CircEl-Paper busca reemplazar el material compuesto estándar FR4, de fibra de vidrio y polímero, con un sustrato de papel para hacer los PCB más fácilmente reciclables. En términos de huella ecológica, se estima que esto significaría una reducción de hasta el 60% en las emisiones de CO2 equivalentes.
El proyecto CircEl-Paper está financiado por la Unión Europea como parte de su plan de acción para lograr una economía completamente circular, sostenible y con emisiones de carbono cero para 2050. Esto implica intervenciones normativas, como la introducción del «derecho a reparar» o el «cargador universal», así como el apoyo a la investigación de nuevos materiales con una mejor huella ecológica, como el papel.
Financiado por la Unión Europea, Número de subvención: 101070114.